Discapacidad Social??

Mientras hacía la fila para marcar mi pase escolar en el Metro en la estación Vicente Valdés, me llamó la atención un pito bastante desagradable y luego un guardia que decía "no más de cuatro personas en el ascensor, por favor" y cuando miro veo que en susodicho ascensor iban 7 personas y ninguna de ellas con algún problema de discapacidad siendo que afuera de éste habia un enorme, pero ENORME letrero amarillo con letras negras que decía "Uso exclusivo discapacitados".

Luego, ya camino a Tobalaba el asiento que es para discapacitados OCUPADO y por una persona que se veía totalmente sanito por donde se le mirase y de vuelta a mi casa, ¡¡la misma historia!! el asiento ocupado por un viejo que tenía una cara de degenerado que no se la podía ni él y cuando se paró una señora saltó y me dijo "¿me puedo sentar?" "Eeeehhh no sé señora, el poto es suyo no mío" pensaba yo para mis adentros y mirando ya con cara de tristeza y rendida ante tanta inconciencia sobre las necesidades de los demás, como no ser capaces de mirar a tu alrededor y ver que ciertas personas necesitan estos lugares y que por un motivo están ahí.

Viene a mi mente el recuerdo de aquel joven ciego que demandó a Metro por el hecho de que no nombraban las estaciones y de acuerdo a las noticias dicen que ganó la demanda, pero sin embargo yo soy una usuaria asiduada del Metro y nunca escucho que digan el nombre de la estación correspondiente, solo aquellas que son consideradas "importantes" tales como Baquedano, Salvador, Manuel Montt... etc., ¿por qué motivo? ¿cuál es la idea?

El 30 de noviembre y 1 de diciembre es la Teletón y las grandes empresas se llenan la boca con bonitos discursos, grandes sonrisas para las fotos de los diversos medios y suculentos cheques, pero ¿de qué sirve realizar todo esto si no somos capaces de ser empáticos? Nuestra sociedad sufre de discapacidad social, no ven el sufrimiento de sus pares o lo que es peor, si lo ven, pero no están ni ahí porque total, no son ellos los que están sufriendo. Juro que me da vergüenza eso de que dicen que Chile es el país más generoso de América y ver que existen esta clase de falencias.

Debo reconocer que cuando vengo de vuelta de clases, toda hecha pebre, me dan unas ganas increíbles de usar aquellos asientos, pero surge mi kinesiologa interna cual Pepe Grillo y me dice no, es que en realidad es terrible tener una discapacidad y no poder sentarte en un lugar cómodo, mamarte el dolor... como me pasó hace unos años atrás cuando estuve enyesada dos semanas desde el poto hasta el tobillo, ir en una micro y que ninguno me diera el asiento, simplemente es terrible.

Somos los primeros en criticar a alguien cuando comete un error y somos capaces tirarle cuanta mierda sea posible, sin embargo no vemos nuestros propios errores y que terrible es cuando se tiene una viga gigante en el ojo como esta... duele y da rabia.

No sé si soy muy inocente o que, pero espero confiada en que nuestra mentalidad va a cambiar y seremos capaces de ponernos en los zapatos, en el pellejo o como quieran llamarlo, del otro.